Gastos compra casa: qué pagar al adquirir una vivienda en Argentina
Al gastos compra casa, muchas personas solo piensan en el precio de la propiedad, pero en Argentina, ese es solo el inicio. Lo que realmente te cuesta tener tu casa propia incluye escrituras, impuestos, arreglos legales, gastos comunes y hasta cuotas de mantenimiento que empiezan el día que firmas. Escritura inmobiliaria, el trámite legal que transfiere la propiedad de forma oficial ante notario. También conocida como escritura pública, es el documento que te convierte en dueño legal, y su costo puede llegar a un 3% del valor de la vivienda, dependiendo de la provincia. No es un trámite opcional: sin ella, no tienes derechos sobre la casa, ni siquiera si ya pagaste todo en efectivo.
Impuestos propiedad, los cobros que el Estado exige al cambiar de dueño una vivienda. También llamados impuestos de transferencia inmobiliaria, varían entre el 1% y el 4% del valor fiscal, y en muchos casos, el comprador los paga. Además, hay que considerar los gastos comunes, las cuotas mensuales que pagan los vecinos en edificios o barrios cerrados para cubrir limpieza, seguridad, mantenimiento de áreas comunes y servicios. Estos pueden ir desde $10.000 hasta más de $100.000 mensuales, según el barrio y las instalaciones. Si compras un departamento, estos gastos no desaparecen: los asumes desde el primer día, aunque aún no hayas mudado. Y si la propiedad viene con deudas pendientes —como servicios no pagados o multas por reglamento de copropiedad—, esas también pueden caer sobre ti si no revisas bien el historial antes de firmar.
Lo que muchos no dicen es que los gastos de compra no son solo financieros: también son de tiempo y atención. Elegir un escribano confiable, pedir el certificado de dominio, verificar que no haya embargo, revisar el reglamento de copropiedad, entender si hay cláusulas de prohibición de mascotas o de alquiler: todo eso forma parte del proceso. No es un trámite rápido, ni barato, pero sí controlable si sabes qué buscar. En esta colección encontrarás guías reales sobre cómo evitar sorpresas, cómo negociar para que el vendedor pague parte de los gastos, qué cláusulas protegen tu dinero y cómo entender si el precio que te ofrecen realmente vale la pena. No te dejes llevar por el entusiasmo de tener tu casa. Revisa, pregunta, compara. Tu bolsillo te lo agradecerá.
