Camisa de cuadros: símbolo de moda, clase y resistencia política

La camisa de cuadros, una prenda de vestir con patrón geométrico de cuadros, comúnmente de algodón o lana, asociada históricamente a trabajadores, rebeldes y movimientos sociales. También conocida como flannel shirt en algunos contextos, ha sido usada por mineros, campesinos, estudiantes y activistas como señal de identidad y resistencia. No es solo ropa cómoda: es un mensaje vestido. En Argentina, donde la lucha por los derechos laborales ha marcado la historia, la camisa de cuadros aparece en fotos de sindicatos, marchas y asambleas. No porque sea obligatoria, sino porque representa algo real: el trabajo con las manos, la sencillez, y la negativa a vestirse como los que mandan.

Esta prenda se conecta directamente con otros símbolos de ropa que tienen peso político. El símbolo de ropa, cualquier prenda que transmite una idea política, ideológica o de pertenencia a un grupo no siempre es una camiseta con un lema. A veces, es una camisa de cuadros usada por un obrero en una huelga, o por un estudiante en una toma universitaria. Se relaciona con el vestuario militante, el conjunto de prendas que expresan compromiso político sin necesidad de palabras, como las gorras de los piqueteros o los pañuelos de los movimientos feministas. La camisa de cuadros no grita, pero sí dice: "aquí estoy, y no me voy".

Y no es casualidad que aparezca en tantas fotos históricas. Desde los mineros de Salta hasta los obreros de la industria textil en La Plata, la camisa de cuadros fue la ropa accesible, duradera y práctica para quienes trabajaban en condiciones duras. Hoy, en pleno siglo XXI, sigue siendo usada por quienes rechazan la moda rápida y el consumismo vacío. También aparece en campañas de sindicatos, en eventos de izquierda y en protestas contra la precarización laboral. En ese sentido, no es solo una prenda, sino un recordatorio de que la dignidad no se viste de marca, sino de historia.

Lo interesante es que esta misma camisa, en otros contextos, fue usada por sectores conservadores o incluso por figuras de la derecha. Pero en Argentina, su raíz sigue estando en la clase trabajadora. Y eso la hace poderosa. No se trata de quién la usa, sino de por qué la usa. Si alguien la elige por comodidad, está bien. Pero si la elige porque sabe lo que representa, entonces se convierte en un acto político.

Lo que encontrarás en esta colección son artículos que exploran cómo la ropa no es neutral. Desde cómo los revolucionarios americanos vestían hasta qué dice la ley sobre uniformes laborales, pasando por el vínculo entre moda y poder. La camisa de cuadros es solo un ejemplo. Detrás de cada prenda hay una historia, una lucha, una decisión. Y en este sitio, no ignoramos esas historias.